Chilpancingo, Gro., 1 Mar (Agencia Informativa de México).- El Centro de Derechos Humanos de La Montaña (Tlachinollan) acusó que al Instituto Electoral y de Participación Ciudadano (IEPC) de que llevó a cabo un trabajo de difusión “limitado”, permitió “la compra y coacción de voluntades”, no garantizó la asistencia técnica, ni capacitación previa”, en la consulta sobre el método de la elección de autoridades municipales por el sistema de Usos y Costumbres, en los municipios de Tecoanapa y San Luis Acatlán.
A través de un comunicado, el organismo civil de Derechos Humanos afirmó que el órgano electoral no cumplió a cabalidad, porque su labor sólo se circunscribió en las cabeceras municipales, tanto en trabajos preparatorios, como en la etapa informativa, y con ello, no se dio cumplimiento a los principios que rigen el derecho a la consulta “que debe ser previa, libre e informada”.
Agregó que: “En lugar de impulsar y reconocer estas iniciativas que, tienen las comunidades indígenas, las instancias electorales se empeñan en desacreditar sus planteamientos y en negarles el derecho a ser reconocidos como sujetos de derecho público”.
Que el Instituto Electoral para garantizarles el derecho, tuvo que haberles proporcionado información suficiente, adecuada y en su propia lengua a cada una de las comunidades indígenas de cada municipio, “desde el inicio del proceso de consulta y con la debida anticipación”, porque los pueblos originarios debieron contar con un plazo razonable para llevar a cabo un análisis sobre los alcances y ventajas de la nueva forma de elección, “el cual protege sus derechos colectivos”.
“La finalidad de la consulta era impulsar un diálogo intercultural, que garantizara la participación de los ciudadanos y las ciudadanas indígenas, y tomara en cuenta las decisiones que asumen de manera libre e informada sobre la elección por usos y costumbres”, como tampoco se aplicó la máxima publicidad, con mensajes apropiados y en lenguas maternas.
Las autoridades electorales debieron garantizar equidad en la promoción de la consulta, independencia en la organización y respeto a las formas de organización de las comunidades; tuvieron que intervenir para evitar las presiones, la propaganda negativa, la desinformación, así como la compra y coacción de las voluntades, por parte de las autoridades municipales y los líderes de los partidos políticos.
Lo grave en el proceso, indicó Tlachinollan, es que no se brindó la asistencia técnica y capacitación previa que se requería para que las personas organizaran bien los trabajos. Tampoco se impulsaron asambleas comunitarias para garantizar la participación de la totalidad de la población.
El pasado fin de semana, el Instituto Electoral de Guerrero consultó a 54 pueblos originarios del municipio de San Luis Acatlán, zona de la Costa Chica, si estaban de acuerdo con el cambio de modelo de elección de sus autoridades municipales al de Usos y Costumbres.AIMX/FSZ